Ingredientes:
24 unidades galletas María molidas
C/n mantequilla derretida
250 gramos queso crema a temperatura ambiente
1 1/2 taza azúcar
1 kilo queso Ricota de leche entera
6 huevos
3 cucharadas harina
1 cucharada ralladura de limón
al gusto Vainilla (a mí me gusta mucha vainilla)
Molde del que se desmolda a los lados
Preparación:
Precalentar el horno a 150 grados. Engrasar un molde del que se desmolda a los lados.
En un recipiente mezclar las galletas María molidas (en la licuadora se pueden moler o también colocándolas dentro de una bolsa y pasándoles un rodillo) y agregar la cantidad necesaria de mantequilla derretida para formar una pasta.
Manualmente cubrir el molde con esta pasta. Llevar el molde al horno por diez minutos o hasta que dore un poco la base.
Relleno: Batir a velocidad media el queso crema a temperatura ambiente junto con el azúcar. Agregar a esta mezcla el queso Ricota. Añadir los huevos uno a uno batiendo buen entre cada uno. Incorporar las cucharadas de harina. Por último, añadir vainilla y ralladura de limón. Continuar batiendo hasta unir todos los ingredientes.
Colocar esta mezcla en el molde con la base de galletas y llevar al horno. Retirar la torta del horno cuando haya transcurrido una hora y 15 minutos aproximadamente. Separar cuidadosamente los bordes de la Torta del molde. Dejar enfriar totalmente para luego llevarla a la nevera tapada con papel aluminio por alrededor de tres horas o hasta el día siguiente si la hicieron con anticipación. Pueden comerla así o decorarla al gusto. Buen provecho.
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